Si eres amante de la naturaleza pero no cuentas con un espacio de patio o jardín exterior, decorar con macetas, jardines internos, secos o verticales son solo algunas de las alternativas a tu disposición.
El reino vegetal tiene plantas ornamentales para todos los gustos y colores, por ello, el tamaño no será un problema. Si lo que buscas es dar un toque natural a tu oficina opta por macetas pequeñas que aporten color y personalidad al ambiente. Por otro lado si quieres realzar la vida en la sala común elige macetas grandes que sigan el estilo de decoración del resto del lugar, que lo que resalte sea la planta más no la maceta.
Los jardines internos pueden permitirte separar ambientes dependiendo de su extensión y mantenerte en estrecha relación con la naturaleza incluso en espacios cerrados. El jardín seco como su nombre lo indica es un estilo propio de jardín con baja necesidad de agua. Este tipo de jardín proviene del estilo tradicional oriental. Asegúrate de conseguir las plantas adecuadas para interiores y de contar con la iluminación correcta.
Una pared grande sin decoración puede ser el receptor perfecto para un jardín vertical. Las ventajas de esta creativa idea son la nula necesidad de espacio en el suelo o en muebles adicionales, además de crear una sensación envolvente y acogedora. Complementa esta idea con macetas colgantes.
Agregar plantas transforma de forma sencilla tus espacios en lugares de descanso, paz y tranquilidad. Además el verde aporta positivismo, sensación de alegría y salud a un ambiente.